a Analítica digital para el comercio tradicional

Fecha de publicación el 04/03/2018

Analítica digital para el comercio tradicional

Flame Analytics desarrolla una herramienta para estudiar el comportamiento de los clientes mientras realizan las compras

La analítica digital aplicada a las ventas del comercio tradicional. Los programas informáticos permiten un conocimiento exacto del comportamiento de los usuarios de internet, pero hasta ahora esa forma de medir no se había podido aplicar en las compras en tienda. Consciente de esta limitación, la empresa asturianaFlame Analytics ha desarrollado un proyecto de I+D+i tecnológico con el que suplir esas carencias y analizar los hábitos de compra de los clientes.

¿Por qué entramos en unos establecimientos y no en otros?, ¿en qué zonas de los comercios nos movemos?, ¿qué parte atrae más nuestra atención?, ¿qué aspectos del servicio nos satisfacen más? El proyecto de Flame Analytics da respuesta a todas estas preguntas y lo hace, según explica Jonathan Solís, CEO de la empresa, de «forma rápida y sencilla». Con su herramienta, la empresa proporciona «información muy valiosa a las empresaspara tomar decisiones que lleven a ofrecer una mejor experiencia de compra y conseguir mayor fidelización y, en definitiva, mayores ingresos». Flame puede aportar datos como cuántos clientes entran, cómo se mueven, cuánto gastan, cuánto tiempo están, si repiten o no, cuántos son hombres o mujeres, edades... De esta forma se conoce al cliente y sus gustos y esta información permite adaptarse mejor a lo que busca el consumidor.

La idea de Flame nació hace tres años, aunque la fase de comercialización del producto comenzó hace año y medio. Solís afirma que se trata de un producto «diferente, innovador». La idea surgió al comprobar que en el e-comerce se puede medir todo, mientras que en comercio tradicional no era posible. Por ello, y aprovechando «hardware estándar», como la conexión wifi social, el CEO de la empresa explica que «podemos medir el comportamiento de los clientes». Y todo ello de forma anónima, ya que el cliente en ningún momento tiene que aportar sus datos ni identificarse.

La empresa ya tiene entre sus clientes empresas de renombre en sus sectores, como puede ser Decathlón, Carrefour o La Caixa. Son clientes de envergadura, pero Solís deja claro que su objetivo es extender su proyecto al pequeño comercio. «Queremos apoyar ese tipo de negocio porque no queremos que desaparezca y esta es una herramienta que puede ser muy útil», asegura.

Los inicios de la empresa

La empresa está ubicada en Gijón, en los bajos del estadio de El Molínón. Pero para llegar hasta la situación actual, la evolución ha sido lenta. Después de superar una etapa de I+D, su proyecto fue seleccionado por el ICEX para, junto a otras 10 empresas, ir a Silicon Valley. Solís explica que la idea inicial era estar allí entre dos y tres semanas, periodo en el que los organizadores le facilitaban una oficina y una agenda de actividades en las que se incluían reuniones con posibles inversores.

Ese era el plan inicial, pero los responsables de Flame se quedaron allí un mes y medio. «Vimos que la idea era buena, que allí ya había algo parecido y nos reunimos con empresas que se dedicaban a algo similar. Fue muy fructífero», asegura el responsable.

La empresa cuenta con diez trabajadores y su intención es seguir creciendo. En su evolución, ha tenido un papel importante el grupo IDEPA. «Después de superar la fase de investigación, cuando nos lanzamos a la etapa comercial buscamos financiación público privada. Conseguimos dos inversores y fue importante la ayuda del CEII y de la SRP». Ahora la empresa busca su internacionalización y hay nuevos grupos de inversores interesados en entrar en el proyecto.

«Para nosotros el apoyo de la SRP y del IDEPA tiene mucha importancia», señala Solís, quien añade que «cuando haces un proyecto de este estilo tiene un alto riesgo. Son muy tecnológicos y aunque tengas una idea muy buena, es posible que el mercado no lo sepa ver. Nosotros buscamos inversores para no depender de los bancos y la ayuda del IDEPA nos vino muy bien». «Para nosotros es fundamental y un elemento diferenciador de la región respecto a otras. Estamos muy contentos de tener su ayuda», sentencia.

Las ayudas del grupo IDEPA

La Sociedad Regional de Promoción del Principado de Asturias (SRP) concedió un préstamo participativo de 200.000 euros a Flame Analytics en junio de 2017. Además, el Centro Europeo de Empresas e Innovación del Principado de Asturias (CEEI) le prestó apoyo para elaborar su plan de empresa y certificó el plan para acceder a ayudas del IDEPA. También participó en la misión comercial a Dublin (organiza por Asturex, CEEI y cluster TIC).

Jonathan Solís participa como ponente en alguna formación de las que imparte el IDEPA, como el Master de ingeniería informática de la Universidad de Oviedo y el taller de preparación para inversores privados.